La medida fue impulsada por el oficialismo y avanzó con la presión del gremio de los taxistas, que se concentraron frente a la Legislatura. De acuerdo a la nueva norma, las multas a los conductores de Uber llegarán hasta $200.000 y podrían perder la licencia.
En la puerta de la Legislatura, los taxistas festejaron. Dentro del recinto se aprobó una ley que apunta a frenar el avance de Uber en la Ciudad, en línea con la postura del Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. De acuerdo a la nueva norma, las multas a los conductores de Uber llegarán hasta $200.000 y podrían perder la licencia.
La votación se realizó en sesión ordinaria, con 37 positivos, 11 negativos y 9 abstenciones. El proyecto de ley que se aprobó modifica artículos del Código de Tránsito y Transporte de la Ciudad, el Régimen de Faltas y el Código de Habilitaciones y Verificaciones, aumentando las multas para los choferes que transporten pasajeros sin contar con la habilitación correspondiente. Una medida directamente apuntada contra Uber.
Impulsada por Vamos Juntos, la iniciativa contó con el acompañamiento de GEN y Bloque Peronista; el rechazo de PTS, Mejor Ciudad, Evolución, Autodeterminación y Libertad y Partido Obrero, así como la abstención de Unidad Ciudadana y Partido Socialista.
Si bien la polémica se concentró en el factor Uber, la medida también implica cambios que apuntan a quitarle la habilitación a los micros escolares que no tuvieran habilitación para el transporte que están realizando -por caso, los micros que trasladan manifestantes-.
“Queremos facilitar los controles, agravar algunas penas y esto va a hacer que haya más seguridad vial; se podrá retener la licencia de conducir cuando el chofer traslade pasajeros sin la habilitación correspondiente, si transporta algo para lo que no fue habilitado o si excede la velocidad”, aseguró la Presidenta de la Comisión de Tránsito y Transporte e impulsora del proyecto, Cristina García y precisó que “queremos ser ejemplares con este tipo de sanciones ya que lo que queremos es evitar que ocurran estas situaciones”.
Entre quienes se pronunciaron en contra, Fernando Vilardo y Marta Martínez (AyL) cuestionaron que “sólo se plantean sanciones a trabajadores precarizados, que empujados por la necesidad desesperante que provocan las medidas económicas que lleva adelante el gobierno de la mano del FMI, y que la oposición en su mayoría avala en el Congreso, salen a juntar unos pesos manejando un coche porque no llegan a fin de mes o porque fueron echados y usan la indemnización con este objetivo, y así proveen de millonarias ganancias a una aplicación multinacional como Uber, que no recibe ningún castigo y opera sin problemas ilegalmente en el país, al punto tal de que hace publicidad en televisión sin ningún límite”. En ese sentido, expresaron: “Rechazamos este rol punitivo del Estado para enfrentar a los choferes de Uber con los choferes taxistas, laburantes que también sufren las consecuencias de una política económica decadente del gobierno de Macri y Larreta”.
Coincidieron al respecto los diputados Patricio del Corro, del PTS, y Gabriel Solano, del PO. “No apoyamos a Uber porque precariza a los trabajadores, pero de ningún modo votaremos una ley que sanciona a los choferes que frente a una creciente desocupación se ganan la vida manejando”, advirtió Solano antes de dar su voto. Y señaló que “es falso que la sanción a los choferes de Uber sea una medida que apunta a la seguridad vial”.