La Policía de la Ciudad, en conjunto con la Agencia Gubernamental de Control (AGC) y el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, desbarató dos fiestas clandestinas con 470 personas que se estaban desarrollando en un bar de Flores y una vivienda particular en Belgrano, al tiempo que detuvo al dueño de un pub de Palermo que se negó a que inspeccionen su local y golpeó a un efectivo policial.
Uno de los hechos ocurrió cuando efectivos de la División Operaciones Especiales Requeridas por el Ministerio Público y la División Operaciones Delictivas, junto con personal de la AGC y el CIJ, en articulación con la Dirección General de Coordinación Operativa, se hicieron presentes en un local gastronómico de Flores, ubicado en la avenida Rivadavia al 7900.
Cuando ingresaron, los agentes se entrevistaron con el encargado, un ciudadano boliviano, y escucharon de fondo música alta, constatando a simple vista unas 400 personas, entre la planta baja y el primer piso, consumiendo bebidas alcohólicas sin tener distanciamiento social ni barbijo, en el marco de un salón que cuenta con un aforo de 200 invitados.
Ante esta situación, por no cumplir con las medidas sanitarias correspondientes debido a la pandemia de Covid-19, el hombre fue aprendido por infracción a los artículos 205 y 239, en tanto que se desalentó la presencia de todas las personas presentes.
Personal de la AGC, en tanto, clausuró el lugar, en el marco de una causa en la que intervino la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Oeste, a cargo del Dr. Galante, Secretaría del Dr. Soda.
Otro de los casos se registró en Belgrano, puntualmente en La Pampa al 3100, donde personal de todas las áreas antes mencionadas se trasladaron hasta un domicilio particular donde se estaba desarrollando una reunión clandestina con 70 personas.
Como se trató en este caso de una vivienda particular los agentes no pudieron ingresar, pero se desalentó la presencia de todos los invitados, los cuales fueron identificados y notificados en su totalidad a medida que iban saliendo del domicilio.
Finalmente, el personal interventor se trasladó por último hasta un pub ubicado en Thames al 1500, en el barrio de Palermo, los cuales fueron violentamente recibidos en la puerta del local por un grupo de personas que no permitieron llevar adelante la inspección.
En este sentido, cuando los agentes llegaron las personas cerraron la cortina metálica del local y uno de ellos, de 29 años, golpeó en la cara a un integrante de la comitiva que intentaba realizar su trabajo de inspección.
Ante esta situación, el agresor fue detenido por “atentado y resistencia a la autoridad”, quien fue identificado como el dueño del lugar y el local gastronómico fue finalmente clausurado por la AGC por “Obstrucción del procedimiento”, “obstrucción de salida” y “habilitación vencida”.
Cabe destacar que en estos dos últimos hechos intervino la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº7, a cargo del Dr. De Santis, ante el secretario Dr. De Brasi.
Dos motochorros robaron un maxikiosco en Balvanera con la encargada como entregadora: los tres detenidos
Dos motochorros fueron detenidos por un robo a un maxikiosco en Balvanera, y a poco de iniciada la investigación la Policía de la Ciudad descubrió que la encargada, hermana de uno de los delincuentes, era cómplice y entregadora de los 370 mil pesos de la recaudación.
Personal de la Comisaría Vecinal 3 B de la Policía de la Ciudad intervino por un hecho delictivo ocurrido en un negocio ubicado en la intersección de las calles México y Combate de los Pozos. Dos hombres, a bordo de una moto, entraron al local y le arrebataron la cartera que tenía la encargada del negocio y el celular a una clienta.
Los gritos de la gente que vio el hecho fueron atendidos por un oficial que reviste en la Comisaría Vecinal 14 A, de la Policía de la Ciudad, que se encontraba de franco y en un rápido accionar detuvo al motociclista.
El cómplice atinó a escapar pero fue interceptado por un móvil de la Comisaría Vecinal 3 B a los pocos metros. Cuando revisaron la cartera sustraída por uno de los ladrones, los policías encontraron en su interior 370 mil pesos.
A poco de iniciar la investigación, los oficiales realizaron consultas sobre el abultado monto que había en la cartera, tras lo cual la encargada reconoció que era hermana de uno de los asaltantes, pese a tener distintos apellidos, y que ambos habían ideado el golpe para llevarse la recaudación del negocio.
La Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 3 dispuso la detención de los dos motochorros y la encargada, a quien se le incautó el celular, en tanto ordenó devolver el dinero al propietario del maxikiosco y el teléfono sustraído a la clienta.