En los próximos días se licitaría un segundo paso bajo nivel que podría estar en la calle Irigoyen en el barrio de Villa Luro.
El Gobierno de la Ciudad licitará el primer paso bajo nivel del Ferrocarril Sarmiento en la calle Lorca. Se trata de una inversión de 8,5 millones de dólares y estará finalizado para 2026.
La eliminación de barreras del FFCC Sarmiento es la principal obra de infraestructura que debe encarar la Ciudad. Los pasos a nivel generan eternas demoras en barrios como Caballito o Flores, dos de los más transitados de CABA.
El Gobierno porteño aún no decidió qué forma tendrá la obra del Sarmiento, por eso, hasta que se defina el proyecto final, la Ciudad comenzó a licitar los sapitos que deberá hacer a lo largo de la traza.
El primero estará bajo la calle Lorca, muy cerca del estadio de Ferrocarril Oeste. Según estiman en Parque Patricios, la obra beneficiará a 55 mil vecinos que transitan diariamente por la zona.
En los próximos días se licitará un segundo paso bajo nivel que podría estar en la calle Irigoyen en Villa Luro. Podría haber una tercera compulsa en algunos meses, pero incluso si se adjudica, el Gobierno deberá esperar a terminar alguna de las dos que estén en curso para avanzar. Por motivos de seguridad, Nación no habilita más de una obra cercana al mismo tiempo.
«Esta obra va a ser clave para mejorar el ordenamiento del tránsito en el barrio de Caballito, reducirá los tiempos de espera y beneficiará a miles de vecinos», dijo el Ministro de Infraestructura Pablo Bereciartúa.
La obra del Sarmiento encierra varias complejidades. El ferrocarril y las vías pertenecen a la Nación y por eso cualquier modificación al trazado debe ser acordada previamente con el gobierno libertario. Pero, además, requiere una inversión de 300 millones de dólares, una cifra inalcanzable sin crédito externo.
Durante la campaña, funcionarios cercanos a Guillermo Dietrich le acercaron el proyecto del viaducto y Jorge Macri se inclinó por esa posibilidad frente a la trinchera que proponía Martín Lousteau.
Aún queda por resolver el contrato firmado por 3 mil millones de dólares con la empresa Ghella, que quedó en suspenso. El acuerdo con Nación era para construir un túnel de Once a Moreno, la más cara de las soluciones, que por su costo quedó descartada. Pero los italianos, que le compraron el contrato a Odebrecht, no quieren dar por perdida la obra.